Una descorazonadora encuesta del "Diario de Burgos" evidenciaba el domingo pasado que sólo dos candidatos a las elecciones del 9-M por esa provincia son conocidos por más del 30% de la población. Y los dos son alcaldes (el de la capital y el de Miranda de Ebro). Y ya se sabe que poco puede apreciarse aquéllo que no se conoceA un diputado le pagan 3.156 € al mes más 1.823 € para gastos, móvil, ordenador portátil, bono de 250 € al mes para taxis más el reembolso de todos los gastos de viaje en transporte público o el kilometraje (a 0,25 € km). Incluyendo los gastos sociales, sale 80.000 euros/año. Un senador tiene semejantes ventajas, excepto que en lugar de teléfono, le dan 99,78 € al mes para que se lo pague.
¿Qué les parece? A mí, ni mucho ni poco, depende: los parlamentarios modelo corcho que llevan más tiempo que los leones, pues caros. Sólo aparecen en campaña haciendo mimos a los ciudadanos, se abrazan a cuatro alcaldes, levantan la uve de la victoria la noche de autos y otros cuatro añitos más a la buchaca. Es un modelo áulico que hace que mucha gente se piense que ser diputado es un chollo. Comparten la actividad con sus puestos privados o con otros cargos públicos, consiguen relaciones que luego emplean en otros menesteres y al final, ni a la familia ni al municipio, lo que defienden es el bolsillo.
Luego está el parlamentario currante, ése que suele estar sentado en el hemiciclo escuchando, que interpela al gobierno propio o ajeno, que no espera a las campañas para entrevistarse con sus paisanos, que no se burla dando ruedas de prensa sólo cuando hay elecciones. El diputado o senador que pone en valor el concepto para el que nació el parlamento elegible por circunscripciones: defender a su provincia allá donde se cuece el bacalao. Éste, menos frecuente, es una delicia, fajador, contingente, señoría de verdad.
Si algún diputado o senador elegible lee esto que haga examen de conciencia de cómo ejerce un cargo que tiene tres meses de vacaciones, que no tiene que andar currando lunes o viernes, que en ocasiones te invitan al extranjero a viajes siderales, te tratan de usía allá donde atan los perros con longaniza. Háganme caso: entren en internet (http://www.senado.es/ o http://www.congreso.es/) y analicen el rendimiento de cada parlamentario, que ahí viene. Y que se pongan las pilas. Porque muchos políticos más cercanos, menos reconocidos y peor pagados, se la juegan a diario frente a los administrados, cara a cara con los problemas, y nadie parece reconocérselo tanto. La democracia es cara. Más barato es el ordeno y mando. Pero, puesto que pagamos, podemos exigir.(En las Cortes de Cádiz se conocía como "culiparlantes" a aquellos diputados que jamás habrían la boca y sólo trabajaban despegando el culo del escaño para votar).
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