El último show

Me parece especialmente atinado el titular de El Periódico sobre lo de Jackson ayer en Los Ángeles, el homenaje despedida que le tributaron ayer en el estadio de los Lakers. Esta mañana estaban muy animadas las tertulias en los cafés respecto del tamaño del homenaje, si se pasaron o no se pasaron los americanos, que si ahora tanto y antes tan poco.

Sigue valiendo la aseveración de un analista que, a los pocos días de fallecer el rey del pop, escribió que Michael vale más "muerto que vivo". Ayer, en La Brújula, Alsina polemizaba con uno de sus contertulios contra argumentos de que "montaron el circo". Estoy de acuerdo con Alsina cuando asegura que el mundo del espectáculo debe despedir a los suyos con un espectáculo sobre el escenario, lo mismo que procede hacer lo propio en una plaza de toros a un torero. Si además esto añade valor y genera negocio, pues a mayores, porque el cantante se ha muerto justo antes de producir ingentes ingresos con una gira cuyos beneficios han de sustituir.

De modo que menos rasgarnos las vestiduras y más aprender de esta gente que, por mucho que algunos les siga pesando, son los reyes en todo, también en el "hollywodiense" y emocionante Jackson show de ayer.

Digo.