martes, 11 de noviembre de 2008

Consejero Real español... de Valladolid


Los ricos también lloran la crisis. Las turbulencias financieras están siendo “terribles”, afirmó ayer la Reina de Inglaterra, Isabel II. La prensa británica calcula que las subprime han engullido 25 millones de libras de la fortuna de la Familia Real, una de las más grandes del mundo –sobre 320 millones de libras, según la última lista de Forbes–.
Ante tal sangría, la Reina no desaprovechó su visita de ayer a la London School of Economics para pedir consejo al director de investigación del departamento de management, Luis Garicano. El economista español fue el encargado de explicar a Isabel II los orígenes y consecuencias de la crisis. “Me ha preguntado si estas turbulencias se prolongarán tanto como todo el mundo espera y por qué nadie alertó de ellas antes”, aclaró a los rotativos británicos el economista español. Mientras el Gobierno busca desesperadamente una silla en la cumbre financiera de Washington, los investigadores independientes españoles se han hecho un hueco en los foros de pensamiento internacional. Garicano es profesor de Economía y Estrategia de la Universidad de Chicago y de la London School of Economics. Además, forma parte del grupo de 230 investigadores que remitieron una carta al Congreso de Estados Unidos criticando la ambigüedad, falta de transparencia y altos costes del plan de rescate financiero impulsado por Henry Paulson, presidente del Tesoro norteamericano. En opinión de Garicano, algunos gobiernos no han aprendido de “los errores de Estados Unidos” y de la crisis de los últimos meses. Por eso, “en el mejor de los casos, nos enfrentamos a una recesión mundial”, alertaba en una entrevista con EXPANSIÓN el pasado 9 de octubre. Garicano advertía recientemente a España de que “nunca fue verdad” que sus entidades financieras estén menos expuestas que las del resto del mundo a la ola de las subprime. “El sistema financiero español, como todos los demás, depende de la calidad del colateral aportado por los que se endeudan. Es cierto que el trabajo del supervisor ha sido excelente. Pero no es un secreto que había (y hay), sobre todo en las cajas, muchos activos que son créditos a constructores ya particulares cuyo colateral son activos inmobiliarios muy sobrevalorados. Una vez que la gente se va al paro y no puede devolver el préstamo; o una vez que el constructor se queda con las casas sin vender, el préstamo vale lo mismo que el colateral”, argumenta.
("Expansion", foto Dailymail)


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