Dias de pasión

Como todo el mundo hablará hoy de la bolsa, que se hunde todos los días un tramo hasta que se ahogue, los tipos de interés, el crash, pongo uno de los asombrosos y cautivadores comentarios de Cárpatos en su página Serenity Markets para entender bien lo que está pasando. Copio un trocito. El resto, pinchando aquí

Era el 11 de agosto de 1984, en un caluroso día, tres meses antes de las elecciones que le convertirían de nuevo en presidente de los EEUU por otros cuatro años más, además por mayoría clara, cuando Ronald Reagan estaba haciendo los preparativos necesarios para decir unas palabras por radio en su rancho de Santa Bárbara. Como hacemos todos a veces, antes de hablar por un micrófono y sin darse cuenta de que el micro estaba abierto y además ya se estaba transmitiendo, algo que no había advertido a pesar de las señales que repetidamente le estaban haciendo los técnicos, empezó a dar golpecitos al micrófono y en lugar de decir como todos 'probando, probando' o 'un, dos, tres' no se le ocurrió otra cosa que decir en plan de broma (y por supuesto que lo que decía se transmitía en directo sin que él lo supiera) algo similar a: ''Tengo el placer de anunciarles que acabo de firmar una ley que va a eliminar a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas para siempre. Los bombardeos empezarán en unos minutos". Ya se pueden imaginar la que se armó en los medios de comunicación y el partido que sacaron de este despiste del presidente. Y es que hay que llevar cuidado con la psicología de la gente, si uno mete miedo aunque sea en plan de broma, se puede armar una buena, como con aquel programa radiofónico célebre, por el que la gente llegó a pensar que realmente los alienígenas invadían el planeta. Hoy los bancos centrales han intentado a la desesperada, jugar con la psicología de la gente, y de manera concertada han tomado la medida de bajar los tipos de interés de manera fuerte. Una medida necesaria en esta crisis, como lo fue el plan de rescate, o la ampliación de los límites a los depósitos. Lo han intentando y se ha jugado bien la baza psicológica, pero el mercado tiene tal miedo que ni con esas, y en una sesión de auténtica locura con las bolsas convertidas en un casino se ha perdido el 7% se ha recuperado después en Europa totalmente para volver a perderlo todo otra vez. Tres recorridos del 7% en el día nos dicen una cosa bien clara, que nos alejemos de las bolsas lo más lejos posible y no volvamos a mirarlas en bastante tiempo, porque esto es un campo de minas gigantesco. Ni cortos ni largos, aquí se puede perder hasta la camisa en 10 minutos. El mercado está sólo para profesionales que se muevan a la velocidad de la luz y que vengan a trabajar con sus necesidades fisiológicas ya realizadas porque no da tiempo ni a levantarse de la silla para ir 1 minuto al baño. Hay pánico en el mercado, hasta tal punto que el crash del 1987, quitado el día clave, parecía una plácida merienda campestre comparado con éste. (......)