¡Quien fuera oso!

Los palentinos amantes de nuestra montaña y de la de León, incluso en mi condición de Pregonero del Día de la Montaña Palentina de 2006, queremos agradecer vivamente a Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, y particularmente, doña Ana Martínez Olalla, la sentencia de la que ésta ha sido ponente, dando por donde amargan los pepinos al único proyecto razonable y viable para la recuperación de esa zona de la provincia.

Queremos, además, agradecer, como miembros del ecosistema que somos, descendientes del mono (si bien a algunos se les nota más que a otros: el origen es común, aunque la evolución es de cada cual) el interés y el cariño por los siguientes seres vivos: oso pardo, desmán ibérico, armiño, gato montés y liebre piornal. Lamentamos que resulten perjudicadas estas otras especies: jóvenes de la zona que quieran trabajar allí sin tener que emigrar, empresarios dispuestos a apostar su dinero, aficionados al esquí (mejor, que cojan su dinero y se lo lleven a las estaciones catalanas, que allí sí se esquía). A estos especímenes, pedorreta, se siente: ¡que hubieran nacido osos¡.

Agradecemos igualmente al TSJ la defensa del peculio de Tres Provincias S.A. sociedad promotora, porque su proyecto tiene una "dudosa viabilidad económica", según sentencia el Tribunal, organismo al que agradecemos que ahora tenga también en cuenta los planes de negocio de los proyectos sometidos a litigio. De hecho, es que no entiendo cómo la empresa dijo ayer que es una mala noticia para la región, con lo agradecidos que deberían estarles a quienes tanto están cuidando de su dinero.

Los palentinos amantes de la montaña damos, por último, las gracias a los cantabrones de la Asociación para la Defensa de los Recursos Naturales de Cantabria (ARCA), entidad recurrente, que hace posible que nos volvamos a enredar en infinitos trámites administrativos y leguleyos mientras otros, incluidos ellos en el Alto Campoo, nos roban la cartera y se quedan con la pieza. Seremos los más legítimos, los más reglamentarios, los más lícitos y los más justos... del cementerio.
3 de abril 2008